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1. Batir las yemas de los huevos con azúcar fina y obtener una crema fina. Añadir un vasito de ron.

2. Incorporar el chocolate rallado y la harina. Por último, echar las avellanas trituradas y una cucharada de postre con levadura.

3. Batir a punto de nieve las claras y remover con un batidor. Incorporar todo al mismo recipiente anterior y seguir removiendo.

4. Pasar todo a un molde redondo y bajo, previamente untado con mantequilla, y meter en el horno durante una hora y media aproximadamente.

5. Sacar del molde la tarta y esperar a que enfríe. Cortarla en tres discos horizontales iguales y pincelarlos con mermelada y de ron.

6. Derretir en una cacerola un poco de mantequilla (a ser posible de coco) y pasarla a un recipiente que contenga el cacao y el azúcar glas pasados antes por el tamiz. Mezclar todo con la ayuda de un vaso de agua mediado.

7. Recomponer la tarta, un disco sobre otro, y cubrir toda la superficie y los bordes con el glas preparado.

8. Para decorar la tarta, se pegarán briznas de chocolate por las paredes.